¿Quiénes integramos esta organización?

Somos eibarreses que han sentido la necesidad de hacer algo ante la crítica situación de nuestros bosques en los últimos años. Formamos un grupo diverso de ciudadanos que se ha unido para contribuir, cada uno en la medida de sus posibilidades, a la protección y restauración del bosque autóctono de Eibar.

Objetivos:

Proteger y restaurar el bosque autóctono de Eibar y territorios colindantes, así como mantener la biodiversidad asociada a su ecosistema: potenciar el bosque, las plantas y animales autóctonos y mantener la salud de sus arroyos para así también mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos y construir un Eibar más habitable.

Actividades:

Planteamos y llevamos a cabo iniciativas para proteger y restaurar los bosques de Eibar y su entorno, promovemos la custodia de tierras y fomentamos diversas actividades para convertir terrenos privados en suelos de pueblo mediante la compra de terrenos y la firma de acuerdos de cesión con propietarios. Organizamos excursiones educativas de montaña y plantaciones de arbolado autóctono allí donde es bienvenido, entre otras actividades.

Arroyos y ríos:

Fuente de vida: Son conducciones naturales que transportan agua dulce, recurso esencial para la supervivencia de las comunidades humanas, la flora y la fauna. Sin ríos sería difícil obtener agua potable, esencial para la supervivencia y la higiene.

Ecosistemas diversos: Los hábitats fluviales tienen una riqueza biológica única. Desde las especies acuáticas hasta las aves y mamíferos que dependen de estos ecosistemas, los ríos son cunas de biodiversidad. 

Bosques:

Conservación de la biodiversidad: Los bosques albergan muchas especies animales y vegetales. Son hábitats esenciales para muchas especies, que les proporcionan protección, alimento y las condiciones adecuadas para la supervivencia.

Regulación del clima: Los árboles absorben dióxido de carbono (CO2) durante la fotosíntesis y liberan oxígeno y humedad a la atmósfera, lo que ayuda a reducir los niveles de CO2, regular el clima y prevenir incendios. Además, los bosques influyen en los patrones de precipitación y en la regulación de las temperaturas locales y globales.

Protección del suelo: Las raíces de los árboles ayudan a mantener la estabilidad del suelo, previniendo la erosión y reduciendo el riesgo de deslizamientos de tierra. Los bosques también actúan como filtros naturales y mejoran la calidad del agua al retener sedimentos y contaminantes.